Aliviar el estrés técnicas de relajación

Estoy estresado… Técnicas de relajación

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Estoy estresado… ¿Cuántas veces nos hemos quejado, agobiados por la falta de tiempo, las prisas, el exceso de tareas… y nos hemos dicho a nosotros mismos: «Qué horror, no puedo más, estoy estresado«?.

Con la vida actual que llevamos no es de extrañar que muchas veces lleguemos a sentirnos desbordados. El trabajo, los niños, los problemas cotidianos, intentar llegar a todo hace que acabemos sufriendo las consecuencias.

Y éstas son que estamos continuamente cansados, de mal humor, con un nerviosismo constante. Todo esto puede acabar provocando incluso problemas en el sueño, malos hábitos en la alimentación…

En ocasiones pueden llegar a aparecer problemas de ansiedad si esta situación de estrés se mantiene a lo largo del tiempo.

Estoy estresado... técnicas de relajación

Aquí os voy a mostrar varias técnicas de relajación, que yo misma he practicado. Pueden utilizarse en nuestra rutina diaria y nos harán sentirnos mejor, más descansados y tranquilos.

Dedicar un tiempo a uno mismo es algo primordial. Sé que a veces el problema viene precisamente por las prisas y la falta de tiempo.

Pero creedme, es mejor emplear unos momentos en nuestro propio bienestar, que a la larga tener que emplear muchísimo esfuerzo para resolver problemas mayores.

Con unos minutos al día será suficiente para sentir poco a poco los beneficios. Hacer un parón en nuestra agitada vida y más si lo tomamos como un hábito cotidiano, redundará en nuestro organismo.

Estoy estresado… Técnicas de relajación

Los ejercicios de respiración no sólo pueden ayudar a relajarnos, a controlar la ansiedad, o el insomnio… Incluso son positivos para mejorar nuestra atención y reducir los pensamientos negativos.

El mejor momento de realizar estas técnicas de relajación es cuando nos despertamos o antes de irnos a dormir. Y lo ideal es elegir un sitio tranquilo en el que nada ni nadie nos distraiga.

Respiración con el diafragma

Simplemente el hecho de modificar el modo en el que respiramos nos ayudará a disminuir bastante los niveles de ansiedad. Así que os voy a mostrar paso a paso el mejor modo de hacerlo.

Podemos realizar este ejercicio tumbados o también sentados, con la espalda recta y en una postura cómoda y relajada. Para comenzar, vamos a centrar la atención en la zona del diafragma.

Colocaremos la palma de nuestra mano en el pecho y la otra sobre el abdomen. Primero observaremos cómo nuestra respiración hace que estas dos zonas se muevan. De este modo, comenzamos tomando consciencia de nuestro cuerpo.

Técnicas de relajación frente al estrés

Respirando de forma normal, es posible que notemos que se eleva más la mano que está apoyada en el pecho. Este tipo de respiración es ineficiente porque la mayor cantidad de flujo sanguíneo para recoger el oxígeno ocurre en las zonas inferiores de los pulmones.

Así que esta respiración rápida y superficial resulta en una transmisión pobre de oxígeno a la sangre. Y por consiguiente pocos nutrientes a los tejidos.

Este tipo de respiración, mantenida a lo largo del tiempo, puede agravar el estrés. E impedir que nuestro cerebro y nuestro cuerpo funcione correctamente.

Nuestro siguiente paso será guiar la respiración hacia la zona del abdomen (el vientre). Manteniendo las dos manos en la misma posición, cogemos aire por la nariz profundamente, despacio, durante unos 5 segundos y lo mantenemos unos segundos en la zona del vientre. Después, expulsamos el aire lentamente por la boca durante otros 5 segundos.

Repetiremos este proceso varias veces, llevando la respiración únicamente a la zona del abdomen. Poco a poco notaremos que nuestras inhalaciones y exhalaciones son más profundas y agradables.

Respirar también es algo emocional

Muchas veces olvidamos que respirar es algo físico pero también relacionado estrechamente con el mundo emocional.  Cuando el cuerpo está agarrotado, la respiración está más limitada y cuando el cuerpo está relajado, la respiración se amplía.

El diafragma respiratorio tiene influencia sobre varias partes de nuestra anatomía pues todo está interconectado.  Su movimiento no sólo se refleja en el tórax. También repercute en otras zonas superiores como la cabeza, cuello y hombros. Y en las inferiores como son todos los órganos abdominales y la pelvis.

Al practicar la respiración diafragmática o cualquier otra técnica de respiración, ten presente no forzar y estar en calma.  Al forzar hay tensión y si hay tensión la respiración se restringe.  Debes tomarte tu tiempo y ser paciente.

Relajación con imágenes

Con este ejercicio conseguiremos llevar nuestros pensamientos a un escenario imaginado, lejos de los problemas e inquietudes que nos bloquean.

Para ello, nos colocaremos también sentados o tumbados y en primer lugar haremos durante unos minutos el ejercicio de respiración del punto anterior. Puedes ponerte música relajante de fondo, que ayuda bastante.

Después, con los ojos cerrados, imagina un entorno natural con el que te sientas a gusto y relajado: puede ser el mar, un jardín, un bosque con árboles… El que tú quieras, siempre y cuando la imagen de tu mente sea lo más detallada y clara posible.

Relajación con imágenes

Mientras continuas con la respiración profunda, ves imaginando los detalles de la escena: el color de las hojas de los árboles, su forma, el tacto de las hojas o de la arena, el sonido de los pájaros, etc. Como si de verdad te encontraras en ese lugar y lo estuvieras explorando.

Unos minutos después, deja que esa imagen se vaya desvaneciendo y desapareciendo lentamente, al tiempo que te vas centrando de nuevo en tu respiración. Cuando la imagen haya desaparecido del todo, abre poco a poco los ojos.

¡Ya verás cómo con este par de ejercicios tan sencillos consigues muchos resultados!

  • Tendrás mayor sensación de bienestar.
  • Conseguirás un mayor control sobre tu cuerpo.
  • Ayudarás a quitar de tu mente los pensamientos negativos.
  • Nos hacen poder afrontar mejor situaciones problemáticas.
  • Reducen el nivel de estrés y la tensión arterial.
  • Disminuyen la tensión muscular.
Como ves, todo son beneficios. Intenta dedicar unos minutos al día en realizar estas técnicas de relajación. ¡Pueden ayudarte a sentirte mejor!

4 comentarios en “Estoy estresado… Técnicas de relajación

  1. A nosotros en la asociación y en la USMI nos han dado muchas técnicas, el mismo Sábado vamos a dar una clase de Mindala (que aun no se ni lo que es). Es buenísimo, y fundamental.

    1. Pues sí, Rocío! No le damos la suficiente importancia y es algo primordial para nuestra salud. Es una maravilla que en vuestra asociación promuevan estas técnicas, todos deberíamos aprender a tomar conciencia de las necesidades de nuestro cuerpo. Que andamos continuamente corriendo, atareados y estresados! Me tienes que contar cómo es eso del Mindala 😉

  2. Este post me viene genial ahora. Voy a intentar ponerlo en práctica, qué importante es saber parar y desconectar. A veces la misma espiral de nervios, preocupaciones y locura diaria no nos deja ver más allá.

    1. Toda la razón 😑 Yo lo he vivido y derivó en ataque de ansiedad… Estas técnicas van genial y me ayudaron mucho, es mejor prevenir que curar. Si las coges por costumbre te logran apaciguar y sentir mejor. Eso, unido a realizar algo de ejercicio, salir a caminar por la naturaleza… Merece mucho la pena disponer un poco de tiempo para escucharse a uno mismo. Un pequeño hueco entre los quehaceres diarios te irá fenomenal. Un beso, guapa! 😘

Mi blog se nutre con vuestras opiniones y sugerencias 😉 Así que, ya sabes, puedes dejar aquí tu comentario, ¡será bienvenido!

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